Así es y poco a poco las grandes zonas de reservas naturales nos las vamos cargando. Ahora toca al Parque Nacional de Serengueti, en Tanzania, según publicaba ayer el diario Público.
Jakaya Kikwete, presidente de Tanzania, ha decidido construir una carretera de 480 kilómetros, de los cuales, 54 kilómetros, serían a través del Parque Serengueti.
El motivo que alega el gobierno tanzano es que es necesario para el desarrollo de la zona sur y vincular este y oeste del país. Nadie pone en duda su deseo de desarrollo pero no a costa de un impacto brutal ambiental que pondrá en peligro las últimas migraciones de animales que aún puede contemplarse en el planeta.
Casi dos millones de ñus, antílopes, cebras... recorren anualmente 2.100 kilometros a través de las llanuras de Tanzania para ir a Kenia, al Parque Nacional Masai Mara, huyendo de la estación seca. Fenómeno conocido como la "Gran Migración" que ocurre durante la estación seca, entre Junio y Agosto y en la que los animales del centro y sur de Tanzania migran hacia las verdes y húmedas praderas de Masai Mara, en Kenia.
Si al final se construyera la autopista tendría graves implicaciones para la biodiversidad del ecosistema de la región.
Además de que la Unesco les amenazara con la retirada del estatus de Patrimonio de la Humanidad al Parque, el Banco Mundial propuso una vía alternativa que de momento ha sido denegada por el gobierno tanzano que insiste en su libertad para construir la autopista dentro de sus fronteras. Dicha propuesta del Banco Mundial, a juzgar por los ecologistas, resolvería el acceso a zonas más subdesarrolladas, pero sin embargo no supondría un impacto para el medioambiente.
Parece que detrás de esta nueva amenaza contra las reservas naturales no está el interés por mejorar a zonas deprimidas de Tanzania, sino está en el concreto interés de alguna multinacional para explotar unos yacimientos mineros en la zona para lo cual necesitan una buena carretera que una este y oeste y poder sacar el mineral al puerto de Dar es Salaam.
Si la construyen, los ecologistas calculan que para 2015 transitarán por ella más de 290.000 vehículos, la mayoría camines y autobuses y para 2035 esta cifra subiría a un millón. Por eso han puesto en marcha una campaña "Parar la autopista del Serengueti"
De momento, en el Parque, en el que estuve hace tres años, sólo hay una vieja pista de tierra por la que se puede circular con una autorización especial.
10 comentarios:
Aquí hay dos problemas: uno cómo lograr que uno de los países más pobres del mundo deje de serlo y, otro, cómo hacerlo con el menor daño posible.
15 de febrero de 2011, 7:08He leído que hay un proyecto alternativo que además contaría con ayuda financiera. Pero, ya sabemos lo que significa para muchos eso de la ayuda financiera.
Así que no conviene perder de vista este asunto.
besos
No aprendemos por más que estemos viendo las consecuencias. Puedes encontrar más información aquí:
15 de febrero de 2011, 7:52http://www.lavanguardia.es/internacional/noticias/20100831/53992521969/una-carretera-en-serengueti-amenaza-la-fauna-africana.html
Desde luego nuestra generación va a pasar a la historia como el colmo de la degradación del planeta. Y es que el cortoplacismo y el consumismo nos ha ganado totalmente la batalla.
15 de febrero de 2011, 9:52Besos.
Salud y República
Una muy mala noticia, sin duda... eso y lo de conceder más años de vida a las centrales nucleares son las dos malas noticias del día en temas de medio ambiente. Esperemos que el apagón de esta noche sea un éxito. Un abrazo!
15 de febrero de 2011, 10:04Nos queramos del mundo que se nos ha dejado,pero no nos preocupamos para nada del que dejaremos...
15 de febrero de 2011, 10:44Un saludo.
Esperemos que se puedan conjugar todos los legítimos intereses de estos países, su derecho al desarrollo y la necesidad de preservar el medio ambiente. Ójala se imponga la razón y terminen contruyendo por donde menos afecciones se ocasionen.
15 de febrero de 2011, 11:53Un abrazo
Siempre sucede lo mismo,que cuando se trata de destruir la biodiversidad siempre hay intereses económicos que les importa un rábano lo que ocurra.Negocio y negocio.
15 de febrero de 2011, 13:46No sé que planeta le vamos a dejar a las generaciones venideras.
Besos
Destruir: esa parece nuestra exclusiva preocupación
15 de febrero de 2011, 15:13Lo malo es que nosotros, Occidente, que nos hemos cargado todo lo que se mueve y que no...¿Conque autoridad moral nos vamos a oponer a que los demás hagan algo similar, sobre todo cuando se trata de comer?
15 de febrero de 2011, 17:54Ya sabes como pienso, estoy en contra, pero me cabe esa reflexión.
Besitos y salud
Espero que no lo consigan.
16 de febrero de 2011, 18:40Un abrazo
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