Siria: Alepo y Apameia

Mientras que Damasco ha sido considerada la ciudad "sagrada", Alepo (o Halab), la segunda ciudad de Siria, situada a 350 km. al norte de Damasco, fue desde la época de los romanos, un próspero centro de comercio hacia el cual convergía el tráfico de Mesopotamia, Persia e India.

Alepo fue destruida por los persas en el año 611 e invadida por los musulmanes en el año 637. En el siglo X sufrió tres terremotos devastadores y más tarde la incursión de los mongoles, siglo XIII, la dejaron prácticamente deshabitada. Finalmente la ciudad cayó en manos del imperio otomano en el año 1517 y a partir de ahí comenzó su recuperación. Durante los cuatro siglos que duró el control otomano volvió a convertirse en un centro comercial importantísimo en todo Oriente y fue sede de colonias de mercaderes venecianos, genoveses y catalanes. Actualmente sus principales industrias autóctonas son las de tejido de seda y algodón. También son típicos de Alepo los frutos secos, esepecialmente sus famosos pistachos.

Hay varios puntos de interés de la ciudad de obligada visita para el turista. Entre estos está La Ciudadela. Está levantada en lo alto de un montículo y domina toda la ciudad. Durante muchos siglos constituyo su núcleo defensivo y en la época de las Cruzadas sirvió como base a los musulmanes. Su único punto de acceso es un puente ya que la fortaleza está rodeada por un foso muy amplio. Esta edificación ha sido ampliada y reconstruidad a lo largo de los siglos. Se cree que las primeras fortificaciones fueron erigidas por los seléucidas en el siglo IV a.c.

Pero si hay algo a mi juicio mucho más atractivo en Alepo es el barrio de Al-Jdeida. Se trata de un laberinto de estrechísimas calles, muy bien conservadas, con fachadas muy sobrias que no dan idea de la magnificencia interior de muchos de estos edificios que constituyen auténticos "reinos privados". La mayor parte de la arquitectura de ese barrio es de época otomana y sus habitantes en su mayoría son cristianos maronitas y armenios.

El Zoco de Alepo lleva fama por ser uno de los mejores de Oriente Medio. Algunas zonas datan del siglo XIII pero la mayor parte que se conserva es posterior, de la época otomana (Siglos XVI al XX).

A 60 Km. de Alepo se halla la basílica del monasterio de San Simenón Estilita, cuyos pórticos recuerdan a los de nuestras iglesias románicas de estilo bizantino. Fue construida en el siglo V por los discípulos del anacoreta, quien, según cuenta la tradición, pasó cuarenta años en aquel lugar, meditando sobre una columna de 15 metros de altura. La verdad es que esta historia es bastante estrafalaria pero ya saben ustedes que hay una parte de la vida del viajero que consiste en realizar alguna que otra "turisticada". Al margen de la realidad de la historia, las ruinas son realmente bellas y el paraje donde se halla situado es impresionante. Por eso lo resalto aquí.

Al sur de Alepo se encuentran los restos arqueológicos de la antigua Apamea, ciudad greco-romana construida en el 300 a.c. por Seleuco Nicator. Si no fuera porque en el mismo país se encuentran las bellísimas ruinas de Palmira, este conjunto tendría más fama. Son realmente impresionantes. Es una versión resumida de Palmira pero en este caso en lugar de ser una ciudad de arenisca rosa, sus edificaciones son de granito gris. Entre sus restos es impresionante la columnata, del siglo II d.c., de 2 km. de recorrido y 37 metros de ancho, una de las más importantes del Oriente Clásico.

En fin, espero que disfruten de estos lugares!

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