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Especulación alimentaria

3 ago 2011


La activista española Esther Vivas, en un interesante vídeo nos da la pista para comprender porque hoy aún existe el hambre en el mundo a pesar de que se producen alimentos para 12 mil millones de personas y siendo como somos en todo el planeta en torno a 7 mil millones. ¿Se pregunta cómo una de cada seis personas hoy día pasa hambre?

Y es que, según explica claramente, los alimentos se han convertido en una mercancía en manos del mejor postor. El sistema capitalista ha impactado brutalmente en la alimentación.

Muchos analistas justifican la hambruna de Somalia por la pertinaz sequía pero en otras zonas también hay episodios frecuentes de sequía, como por ejemplo Australia o el propio Estados Unidos, y allí no hay hambre. 

Para explicar la situación hay que analizar  quién controla hoy los recursos naturales, en manos de quienes están la tierra, el agua, las semillas... 

Somalia en la década de los 70 producía alimentos para atender a toda su población. Era un país autosuficiente. Fue la crisis de la deuda, a partir de los años 80 y con la aplicación de varios programas y políticas de ajuste estructural, impuestos todos ellos por el Banco Mundial y por el tristemente famoso FMI, que países, como Somalia por ejemplo, fueron obligados a abrir sus mercados a las inversiones de grandes multinacionales lo que implicó la liberalización comercial.

Esta liberalización produjo que estas grandes empresas extranjeras comenzaran a vender sus productos alimentarios subvencionados, haciendo una competencia desleal a los productores autóctonos, al poderlos vender muy por debajo del precio de coste.

Estas políticas aplicadas sistemáticamente  durante varias décadas ha supuesto que estos países hayan perdido su capacidad de producción y por tanto han perdido su "soberanía alimentaria". Al no poder competir con las multinacionales, los campesinos han  ido abandonando sus tierras.

Esther Vivas insiste que  la vulnerabilidad alimentaria que asola a estos países del Cuerno de África y a muchos otros, no sólo es consecuencia de factores ambientales sino que es consecuencia del impacto dramático de  políticas de ajustes, de políticas neoliberales que se han aplicado durante tanto tiempo.

El incremento del precio de los alimentos, brutal en los últimos años, es otro factor a analizar. Nos anima la autora a preguntarnos dónde se decide el precio de estas materias primas, como el arroz, el cacao, la soja... Estos precios se deciden en las bolsas internacionales y en los mercados de futuro, de Paris, de Amsterdam, de Chicago, de Nueva York, de Berlín...

Allí es donde se pone el precio de los alimentos y se hace no en función de la oferta y la demanda real, sino que se establece en función de la "especulación financiera". Esta especulación repercute finalmente en el precio final de los alimentos. En estos países de hambruna, el maiz ha aumentado más del 100%.

Estas serían las causas políticas que explican el que una de cada seis personas pasa hambre en el mundo. De ahí que sea imperativo plantearse unas políticas alternativas a la actual, una alternativa defendida por el Movimiento Internacional de la Vía Campesina que pasa por la defensa de la "soberanía alimentaria". Implicaría  que sean los propios campesinos quienes decidan qué se produce, cómo y  el precios de esos alimentos.

Si no se abandonan las políticas neoliberales, el porcentaje de hambrientos irá creciendo de manera alarmante.

Más información en el blog de Esther Vivas.

7 comentarios:

Txema dijo...

También yo me lo pregunto cada día. Sobre todo cuando veo la cantidad de comida que se tira y se desperdicia impunemente.

Como van a la basura toneladas de alimentaod porque han caducado delante de nuestras narices, en nuestros refigeradores. Es inmoral.

Saludos

3 de agosto de 2011, 8:29
mariajesusparadela dijo...

Se empezó tirando al mar alimentos para encarecerlos. Y ahí seguimos, inhumanamente.

3 de agosto de 2011, 10:21
Felipe Medina dijo...

Es indignate que sobrando comida se llegue a estas terribles hambrunas.


Esther hace una situación espeluznante de lo que viene sucediendo por causa de la avaricia

Me ha gustado mucho la entrada.

Besos

3 de agosto de 2011, 13:04
Neogeminis Mónica Frau dijo...

Se trata sin lugar a dudas de un problema muy complejo.
Por supuesto que la aplicación de sistemas donde la producción esté cada vez más centralizada en manos de multinacionales especuladoras agudiza más aún las crisis humanitarias que se vienen sucediendo en los países más pobres. Pero además intervienen muchos otros factores como por ejemplo la sobre explotación de los suelos, la contaminación de las escasas fuentes de agua, la nula política sanitaria implementada en estos países,las guerras por el dominio de los recursos minerales -donde también y fundamentalmente intervienen multinacionales inescrupulosas y políticos locales corruptos.

Hoy por hoy la comunidad internacional debe sentirse absolutamente responsable -por la asistencia inmediata y por la supervivencia futura- de esta multitud de personas que de otro modo están condenados a la muerte.
Un asunto que lamentablemente se suele encarar solamente desde el lado asistencialista pero que -para resolverse en profundidad- debe apuntar a cambiar el conjunto de condiciones básicas en las que estos países están condenados a manejarse.

Un abrazo.

3 de agosto de 2011, 13:36
RGAlmazán dijo...

Nuestro "amado primer mundo" debería sentir vergüenza, si la tuviera, de permitir que por su responsabilidad, fundamentalmente (al menos podría paliarlo, fácilmente) en el hambre que pasan más de mil millones de personas de nuestro planeta.
Pero está claro que no está en su agenda, atender a esta necesidad. Mientras, la sobrealimentación, el exceso de consumo y los alimentos que se desechan por cuestiones de mercado son el pan nuestro de cada día de nuestros "solidarios" países.
Besos.

Salud y República

3 de agosto de 2011, 15:44
Antonio Rodriguez dijo...

Unos especulan de manera vergonzante con cosas como la comida que deberían estar fuera de los mercados especualtivos, pero otros, los gobiernos, lo permiten y no hacen nada para evitarlo. Tanto los unos como los otros son responsables del hambre del mundo.
Salud, República y Socialismo

3 de agosto de 2011, 15:49
Genín dijo...

En el primer mundo, si hay sequía en una zona, las otras siguen produciendo, además hay reservas de agua embalsadas para esas contingencias, y sobre todo es cosa de poder adquisitivo, tu vas al super y compras, esa gente no sabe lo que es eso, por comentar lo mas obvio, que la cosa tiene tela...
Salud y besitos

3 de agosto de 2011, 19:22
 

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