Me consta que el tema de la violencia afecta a muchos colectivos, pero hoy hablamos de la violencia machista ya que sus cifras son aterradoras.
El Delegado del Gobierno para la Violencia de género, en una reciente rueda de prensa, ha hecho una pregunta crucial: "¿qué pasaría si en lugar de 19 mujeres asesinadas en poco más de tres meses, fueran 19 taxistas, o 19 futbolistas o 19 panaderos?" Pregunta provocativa pero que, sin lugar a dudas, lo que intenta es remover las conciencias, según él mismo ha afirmado.
19 mujeres en lo que va de año, sin contar dos casos más que están pendiente de confirmar si han sido o no consecuencia de la violencia de género.
Según los datos proporcionados por el Ministerio de Igualdad, el volumen de casos de violencia machista ha aumentado considerablemente. Siete muertes más que el año pasado en el mismo periodo.
Lo más aterrador es que de esas 19 muertes, solo dos habían presentado denuncia previa. Un reciente estudio muestra que las mujeres maltratadas aguantan una media de 4 años antes de denunciar. En este sentido algo ha ido cambiado porque este plazo hace relativamente poco tiempo era de 7 años.
Ninguna de las mujeres asesinadas que habían denunciado maltrato y con orden de protección, llevaba un dispositivo GPS, sistema de alerta que evita que el maltratador se acerque a su víctima. Al parecer la policía confirma que hay más de 3000 dispositivos disponibles y solo 248 de ellos están activos. La decisión de dotar de un dispositivo de alerta la tienen los jueces.
Analizando estos casos, también se pone en evidencia la falsedad de que los asesinatos proliferan cuando la situación económica es mala. En ninguno de los casos de este año, los agresores estaban en paro.
Mujeres y hombres, la sociedad en su totalidad, tiene que estar concernida con esta terrible lacra. Debemos exigir que se tomen las medidas necesarias para:
*Aislar socialmente al maltratador
*Ayudar a la maltratada para que denuncie los hechos
*Solicitar que se agilicen los trámites de denuncia y que estos trámites no sean tan traumáticos para la mujer denunciante
*Implantar obligatoriamente y como medida preventiva los dispositivos de alerta
*Solicitar el endurecimiento de las penas y el cumplimiento total de la condena
En definitiva, mientras nuestra sociedad en su conjunto no pueda erradicar la violencia machista, seremos una sociedad incompleta.
Todos contra la violencia. Contra toda violencia
Hoy contra la violencia machista
Hoy contra la violencia machista
15 comentarios:
¡Qué casualidad! Hace un rato pensaba en un alumno y su familia. Tengo una próxima reunión con ella y se me ocurría que sus problemas vienen de la falta de educación dentro de ella, de fijar unas normas claras, de establecer un sistema de premios y castigos... No aburro más. Conclusión: la situación actual me hace ver que, en la situación actual, el niño es un explotador de su madre y que no dentro de mucho tiempo será un maltratador si no somos capaces de corregir esta situación a tiempo. Y no te puedes imaginar los esfuerzos que estamos haciendo. Pero como la familia no se implique no hay nada que hacer. Hay es donde empieza el problema.
16 de abril de 2010, 7:47Borra hay y sustituye por AHÍ. Debe ser la hora y se me fueron los dedos.
16 de abril de 2010, 7:49¿Qué hubiera pasado si hubieran sido 19 accidentes laborales? El escándalo sería mayúsculo.
16 de abril de 2010, 7:53Pero tengo la impresión de que en este tema no todos pensamos de la misma forma. Y esto también es consecuencia de la lucha política, mal entendida.
Se ha politizado la cuestión de tal forma que parece que rechazar tajantemente la violencia contra las mujeres, es una postura "izquierdista" y radical.
De hecho, incluso se ha pretendido extrapolar alguna denuncia falsa aislada para desacrecditar la protección a las mujeres.
Creo que también algun feminismo decimonónico contribuye poco a situar el problema en su verdadera dimensión y da argumentos a los "negacionistas".
Esto se hizo mal desde el principio y así nos va.
buen día
Que se puede decir de esto que no se haya dicho ya, me suena y mucho, a cuando había tantas muertes por el terrorismo lo habitual que se hacía el oir eso de "condeno" el atentado. Pues claro que se condenaba por parte de todo.
16 de abril de 2010, 9:25Lo peor es cuando las tragedias se hacen cotidianas, se hacen comunes, de tanto oirlas. No se si te pasará pero cuando eso ocurre se incluye en el catálogo de lo habitual. Ese es el drama.
Evidentemente la ley no esta dando los frutos esperables, y si una ley no da resultados hay que cambiarla. En la violencia doméstica hay mucho de crisis de valores, de una educación machista que permanece a pesar de los cambios que han habido en la sociedad, la permanencia de una visión de la sexualidad y la persona como patrimonio, falta de integración de la inmigración y de unos valores que necesariamente se han de asumir aunque su cultura sea otra. Demasiadas cosas pero que hay que insistir y denunciar todos los que podemos señalar la existencia de esta lacra.
Una matización a Txema, en Castilla y León en el mes de Abril hemos alcanzado 19 muertes por accidentes laborales en 2010, con mas paro y con la construcción por los suelos, hemos alcanzado en abril lo que hubo en diciembre de 2009. Sólo una pequeñísima referencia en algunos diarios. Tampoco esto interesa, tampoco.
saludos,
Es una vergüenza. Lamentable. Me parecen muy bien las medidas que sugieres. Besos.
16 de abril de 2010, 11:04Txema, no es, a mi modo de ver, un buen ejemplo. Creo que van más de 200 muertos por accidentes laborales este año y ni pío, lo que pasa es que esos sí que son silenciados por todos. Ojalá se hicieran visibles como es el caso de los crímenes domésticos.
No a ningún tipo de violencia. Y en este caso: "No a la violencia machista".
Salud y República
Sólo por alusiones. No trato de minimizar la importancia de cada cosa.
16 de abril de 2010, 13:01Lo que quiero decir es que en el tema de los accidentes laborales hay una coincidencia amplia en que se debe hacer mucho más y, en la violencia de género, me da la impresión de que no hay tanta, desgraciadamente. El caso de las pulseras es significativo.
No a la violencia. No a la violencia de género.
16 de abril de 2010, 14:13Me parece muy importante que se apliquen las medidas que sugieres. Y yo añadiría más: protección y ayuda especial para aquellas mujeres extranjeras, o en situación "irregular", que creen no tener ningún derecho y por eso no denuncian a su maltratador. Y educación, educación, educación...
16 de abril de 2010, 14:50No sé qué decir porque entre todos ya han dicho lo evidente. Espero y deseo más medidas contra esta lacra.
16 de abril de 2010, 19:01Un abrazo y buen fin de semana.
Nadie,absolutamente nadie puede permanecer impasible ante esta nueva lacra que nuestra sociedad viene padeciendo.
16 de abril de 2010, 19:06Cada mujer muerta es una gran herida que se perpreta contra la sociedad entera.
No caben dudas ni titubeos:denuncia y aislameinto social
Besos tardíos
La violencia, como en este caso, contra las mujeres, es la última expresión de un conflicto que comienza mucho antes del hecho físico de la agresión. Es en la relación de la pareja, en la situación familiar, en los desarreglos de personalidad, en la manera de encajar o no con el entorno, donde radica la violencia.
16 de abril de 2010, 19:18Los modelos que hemos tenido los hombres para comportarnos con las mujeres y con nosotros mismos, son el germen del que han brotado estos cardos borriqueros.
Digo como Rafa: Los accidentes laborales pasan desapercibidos, no tienen propagación y se soportan sin grandes noticias en los medios. Parece como si hubiéramos asimilado las muertes de los trabajadores como un impuesto. En este mundo hay muchos frentes abiertos.
17 de abril de 2010, 0:01El del maltrato es uno de ellos sobre el que nos hemos de volcar. Es insoportable que mueran mujeres por ese machismo cultural que nos acompaña desde la noche de los tiempos. No se olvide que Dios creó a la mujer de una costilla del hombre... ¿Será por eso que se cree dueño de ella? ¡Cuánto daño ha hecho la religión en este sentido!
Pero si hubieran sido 19 militares o funcionarios del estado o políticos de turno, la cosa cambiaría. Los que es habitual se soportan... habrá que cambiar los hábitos.
Un abrazo
Muy cierto Carmen, lo peor es la inhibición de las personas del entorno de la víctima y del maltratador.
17 de abril de 2010, 0:21El delincuente se siente con derechoa a hacer la vida un infierno a su pareja o expareja porque en su vida cotidiana no siente presión alguna de su entorno.
La sociedad debe dar un paso mas y aislar al delincuente de este tipo de delitos, no apoyar con la indiferencia este tipo de comportamientos y desde luego la educación para la prevención es crucial.
Gran post (como siempre), un besote.
Salud y República!!
Nexus.
Las campañas contra este tipo de violencia deben incidir más en concienciar al entorno de los maltratadores, porque el maltratador lo que necesita es tratamiento siquiátrico.
17 de abril de 2010, 8:20Debería ser una lucha de todos. Su única razón es la violencia. Nuestra razón es la vida.
19 de abril de 2010, 13:20Carpe Diem
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